EL ORIGEN DE LOS JEANS


Los pantalones vaqueros o jeans son piezas habituales del vestuario moderno. Pero ¿cuál es su origen?

Pues debemos buscarlo en un sastre judío de Baviera llamado Levi Strauss (1829-1902) que emigró a los Estados Unidos en busca de fortuna.

Strauss se estableció en San Francisco en 1850, dedicándose a vender a buen precio lona para cubrir vagones y para confeccionar tiendas de campaña. Pero el Ejército le devolvió una gran partida de lona que le habían encargado, aduciendo mala calidad. Encontrándose así sin manera de rentabilizar su inversión se vio obligado a usar la imaginación y decidió fabricar con la tosca tela unos pantalones para aprovechar el tirón de la fiebre del oro recientemente desatada.

Estos pantalones eran lo bastante resistentes como para soportar las duras condiciones de trabajo de los mineros y contaban con un suficiente número de bolsillos como para guardar las muestras de minerales y las herramientas de uso más frecuente. Incluso, para reforzar la prenda, le puso remaches a la costura del pantalón.

Estos pantalones fueron utilizados también por los vaqueros y han sido identificados con el lejano Oeste, llegando a considerarse como el genuino estilo de vestir estadounidense.

En 1860, Strauss cambió la lona por una tela más resistente fabricada en Nimes (Francia) y que era originaria de la ciudad italiana de Génova. Los franceses llamaban a tal ciudad Genes, que pronunciaban jeans. De aquí el nombre.